Edificio Sciarra
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Datos principales
Identificación
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Ubicación
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Descripción del bien
- Uso original: Apartamentos en plantas altas, y comercios en planta baja
- Actual: Apartamentos en plantas altas, y comercios en planta baja
- Estado de conservación: Bueno
- Intervenciones de conservación: Limpieza de fachada.
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Características principales del bien
El edificio Sciarra, obra de los arquitectos Antonio Chiarino y Bartolomé Triay construida en el año 1930, se encuentra en la esquina conformada por las calles Sarandí y Treinta y Tres, y responde a uno de los programas más comunes de la época: apartamentos para renta, en las plantas altas y locales comerciales en la planta baja.
El edificio se encuentra en una situación urbana muy particular, no solo por el hecho de ser esquina sino por encontrarse en un lugar de transición entre un edificio sin mayor valor histórico por la calle Treinta y Tres y un edificio de gran valor arquitectónico e histórico como la Iglesia Matríz. El reto de la situación supone una solución formal donde el edificio se implante con autoridad hacia la esquina, resaltándose por encima de su lindero por Treinta y Tres, pero sin quitarle ningún tipo de protagonismo a la Iglesia Matríz, quien sin duda es el hito más importante de una cuadra. La composición lograda por los arquitectos Chiarino y Triay parece lograr su cometido, tanto en su contexto original, como en el presente.
El edificio adopta para su fomalización el Art Déco francés que se exterioriza mediante elementos tales como; la herrería de puertas y los balcones del primer nivel; los distintos bajorrelieves con motivos florales, que acentúan la verticalidad del edificio; los balaustres geométricos; los bow-window en forma de zig – zag que ayudan a que el edificio se adapte a la situación urbana; las cornisas, también resaltadas con bajorrelieves; y finalmente las mansardas en el último piso del edificio.
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Evaluación urbanística
El edifico Sciarra representa un muy buen ejemplo de la arquitectura que integra dispositivos formales Art Decó en las distintos sectores de la ciudad. En esta situación particular de un predio esquina en la Ciudad Vieja, los arquitectos plantean una estudiada resolución a las distintas condicionantes del contexto urbano, un dinamismo relevante en su esquina, la tensión latente entre verticalidad y horizontalidad y un ajustado manejo de la volumetría. Sus detalles ornamentales se integran con solvencia y complementan el carácter relevante de la obra.